La Habana.- LA ELECCIÓN de Jorge Luis Alayo y Noslen Díaz entre los más destacados del deporte en Cuba en 2024 resultó justo reconocimiento a su paso por canchas de voleibol de playa, sobre las que dieron continuidad a un año en que acapararon la condición de mejor equipo.

En premio a saldos con que se ratificaron en la élite mundial, la encuesta organizada por el Inder y los medios de prensa definió que Alayo volviera a merecer la distinción de mejor atleta en deportes colectivos y su compañero se incluyera entre los diez más sobresalientes.

Dos años después de constituirse,  el tándem de Villa Clara y Artemisa  terminó el 2024 en el top ten del ranking mundial, específicamente en el octavo puesto con 5940 puntos, según la actualización difundida el 2 de diciembre por la Federación Internacional de Voleibol (FIVB).

Durante la temporada que termina, los medallistas de plata en los Juegos Panamericanos de Santiago y de bronce en la cita centrocaribeña de San Salvador, disputados en 2023, protagonizaron actuaciones de ensueño en el Pro Tour Mundial, enfrentados a connotados rivales para reclamar espacio en la cita olímpica de París.

Claras demostraciones de entrega, combatividad y alto rendimiento les permitieron conquistar preseas de plata en los challenges de Recife y de Saquarema, en Brasil, y en Stare Jablonki, Polonia, además de bronce en el torneo élite de Tepic, México, el nivel superior del prestigioso circuito playero.

También sumaron puntos para su clasificación olímpica con lugares cuarto en el Challenge de Guadalajara y noveno en el de Xiamen, y con el metal de bronce en la final del circuito Norceca 2024.   

En París, en original y atractivo escenario frente a la Torre Eiffel, sorprendieron en su grupo al vencer sensacionalmente a los favoritos Estados Unidos y Brasil, cuarto y segundo del listado del orbe, respectivamente, y también barrieron a Marruecos para dominar invictos.

Con lógica ilusión avanzaron a octavos de final. Entonces, solo un dúo del calibre de los suecos David Ahman y Jonathan Hellvig pudo frenar 2-1 el empuje del eufórico adversario que hizo soñar a millones de cubanos y ganar los aplausos de la afición local.

Probada exquisitez la de los europeos, quienes no por azar terminaron por proclamarse campeones y continúan líderes del ranking mundial.

El noveno escalón ocupado por los alumnos de Francisco Álvarez Cutiño dejó el agradable sabor asociado a progreso técnico-táctico, análisis de contrarios, dar batalla hasta el punto final y habilidades que solo se perfeccionan con la reiteración de combatir contra los grandes.

Luego, concluyeron competitivamente el 2024 con su segunda participación consecutiva en el campeonato nacional de Rusia, donde encabezaron la fase de Kazán y terminaron quintos en la final, en Anapa, en tanto se despidieron con triunfo en la Supercopa, en la que se midieron a parejas locales de reconocido rango internacional.

Junto a ellos vivieron esa experiencia las segundas figuras en ambos sexos, Damián Gómez-Eblis Veranes, y Yenifer Rivera-Maykelín Drik, quienes después asistieron al Norceca Sub-23 años y lograron clasificar a los II Juegos Panamericanos Júnior de Asunción 2025.

Pero la familia del voleibol de playa no se conforma con estos resultados, pues siempre se traza metas más altas, como las abrazadas por Noslen y Jorge Luis, quienes pretenden superar en el mundial de Australia, el próximo año, sus lugares 17 de Roma 2022 y Tlaxcala 2023.

Con esa mentalidad se trabaja igualmente en el sector femenino, aún sin el nivel de sus compañeros, como comienzo de un ciclo olímpico con aspiraciones más ambiciosas, aunque difíciles. Será el primer tramo rumbo a los Juegos de Los Ángeles 2028.